Los dispositivos diseñados para aprovechar la energía de las corrientes marinas a altas profundidades presentan inconvenientes ¿Cuáles serían? Es su alto coste de fabricación, instalación y mantenimiento.
Con relación a este problema el grupo de investigación Tecnológico en Energías Renovables Marinas (GITERM) de la Universidad Politécnica de Madrid (UPM) (España) desarrolló un método. Este consiste en el análisis del coste del ciclo de vida de un parque de generación de energía eléctrica. En este sentido, estos dispositivos pueden ser utilizados en fases de diseño tempranas.
La energía eólica en el mar se ha desarrollado ampliamente. Los expertos coinciden en que el próximo paso es aprovechar la energía de las corrientes marinas. Estas se producen principalmente por las mareas. De hecho, hoy en día en Europa y Canadá se han instalado los primeros parques de tipo experimental. Son dispositivos apoyados en el fondo de mar y son conocidos como de primera generación.
Por lo menos un 80% de la energía de las corrientes se hallan en zonas de más de 40 metros de profundidad.
La estructura fijada al fondo del mar tiene un gran por lo que las soluciones de primera generación se hacen inviables. Los sistemas de segunda generación disponen de un sistema de fondeo. Tienen una base o ancla fija en el fondo con una serie de cables que sujetan el dispositivo al fondo marino.
Aprovechar la energía de las corrientes marinas. Dispositivo GESMEY
Según Amable López el dispositivo GESMEY es el primer diseño probado en el mar a nivel mundial. López es investigador del grupo GITERM de la Escuela Técnica Superior de Ingenieros Navales de la UPM.
Esta herramienta de análisis de costes desarrollada ha permitido reducir al mínimo el coste de producción de la energía. Desde el punto de vista técnico y económico se facilita que esta fuente renovable sea competitiva. El potencial de generar electricidad a través de las corrientes marinas es muy grande.
