El proyecto Kardia Tool financiado por la Comisión Europea dentro del programa Horizonte 2020 incluirá un dispositivo portátil, Kardia POC, que detectará los biomarcadores de la insuficiencia cardíaca. Este estará adaptado al dispositivo KardialLOC que es como un “laboratorio en un chip”.
Cada año en el mundo alrededor de unos 26 millones de personas sufren de insuficiencia cardíaca. Así lo señaló la Asociación Europea de Insuficiencia Cardíaca. En ocasiones este trastorno va asociado a un mal diagnóstico por lo que eleva la mortalidad y la morbilidad. En consecuencia, implicaría frecuentes re-hospitalizaciones y además un gran problema para los pacientes y familiares. Asimismo una gran carga económica para el sistema sanitario.
Es necesario mejorar la calidad de vida y la salud en la medida que aumenta la esperanza de vida. Tampoco hay que olvidar que los costes sean asequibles para el paciente y en sí todo el sistema en general. Con relación al diagnóstico es complicado debido a que se manifiesta de manera diferente. Además sus signos y síntomas no son específicos.
Dispositivo portátil. Resultados con garantía de calidad
Con la plataforma Kardia Tool permitirá a los médicos resultados con la garantía de calidad de un laboratorio. El diagnóstico en los pacientes será rápido y fácil. El dispositivo KardioLOC va a ser de un solo uso y de bajo coste y en un solo espacio se integrará todo tipo de: sensores, actuadores, sistemas microelectromecánicos y microelectrónicos, bioquímicos, y nanopartículas magnéticas funcionalizadas. Todo esto hará posibles detectar los biomarcadores por medio de nuestra saliva.
El prof. Joan Bausells trabajará con los sensores de silicio microelectrónicos que detectaran los biomarcadores. Dicho equipo pertenece al Instituto de Microelectrónica de Barcelona (IMB-CNM-CSIC) y colaborará de igual manera en el diseño del KardiaLOC. En cuanto a la síntesis y funcionalización de las nanopartículas magnéticas le corresponderá el Prof. Francesc Teixidor y su equipo. Estos investigadores hacen parte del Instituto de Ciencia de Materiales de Barcelona (ICMAB-CSIC) y son quienes constituirán el soporte para los anticuerpos específico para cada biomarcador.
