Consejos para elegir el mejor compresor frigorífico

elegir el mejor compresor frigorífico

Cuando hablamos de sistemas de refrigeración, como por ejemplo; un aire acondicionado, un deshumidificador, la aerotermia o cualquier otro sistema de climatización artificial que emplee el ciclo frigorífico para producir fío, es necesario hacer especial mención al compresor. 

Es así que, el motor compresor es el elemento fundamental de todos estos equipos, tal es así que, se trata de la parte más costosa. Y no es para menos, pues es la responsable de hacer prácticamente todo el trabajo y gran parte del consumo energético. Es el encargado de mover el gas refrigerante entre el elemento que necesitamos enfriar y el recurso receptor de la energía. Por lo tanto, sin el compresor frigorífico es imposible que se realice el trabajo de refrigeración.

Esto lo podemos ver evidenciado en en cualquier diagrama frigorífico, donde el motor compresor ocupa el lugar más importante del sistema. Dicho sistema se compone también por un condensador, una válvula de expansión y el evaporador. Si bien es cierto, estos elementos también son importantes dentro e cualquier sistema, estos al ser unos simples tubos y otros pequeños mecanismos, sus posibilidades de fallar son relativamente pequeñas. 

Por el contrario, el compresor frigorífico cuenta con una gran cantidad de de elementos de funcionamiento, un tanto más susceptibles a fallar. Tal es así que, los principales problemas y el mayor responsable de los paros en el sistema, es el compresor. 

Por esa razón, es muy importante ser extremadamente cuidadosos al momentos de elegir el adecuado para nuestro sistema. Evidentemente, los compresores Copeland al ser una marca reconocida y de gran trayectoria mundial, deberían ser una de las principales opciones a elegir.

Lo mismo ocurre con los Compresor Bitzer que, también cuentan con elevada reputación internacional y mucha trayectoria. No obstante, en esta oportunidad queremos ofrecerte algunos consejos para elegir el mejor compresor frigorífico en función de tus necesidades, más que por una marca como tal. 

¿Cómo elegir el mejor compresor frigorífico?

Al momento de elegir cualquier tipo de productos, es necesario tener bien marcado los criterios básicos necesarios en función a nuestras necesidades y posibilidades. En el caso de los compresores frigoríficos, es importante determinar cuánta potencia frigorífica necesitaremos para cumplir las necesidades de nuestro sistema.

En estos casos, no será difícil determinar cuál es la mejor opción, ya que en todas las especificaciones podemos encontrar la información para determinar cuál es una potencia alga y cuál es una baja. Sin embargo, en el caso de que la opción necesaria sea uno de capacidad media, puede que haya un poco más de dificultad, debido a la gran variedad que existe en el mercado.  

Como es de imaginar, la disponibilidad económica es otro elemento clave. Si bien es cierto, no es posible afirmar de manera rotunda que los compresores más baratos sean todos de mala calidad, en muchos casos son imposibles de reparar ante alguna avería, ya que vienen sellados o semiherméticos. En el caso de los abiertos, la reparación de compresores es totalmente viable, pero es un tanto más costoso. 

También podemos considerar que los modelos más económicos como el compresor de pistón, ofrecen buenas prestaciones en cuanto a potencia, pero tienen un consumo energético mucho mayor. Por su parte, los compresores de tipo tornillo, son más costosos, pero son mucho más eficientes en cuanto a consumo energético. 

Otro de los criterios a considerar, puede ser el tamaño y la disponibilidad de espacio que tengamos para instalarlo. Esto es algo que debemos determinar desde el principio, pues de nada sirve conseguir el modelo adecuado en cuanto a potencia, consumo energético y precio, si al final no entrará al lugar donde tenemos pensado instalarlo. 

Por otro lado, es necesario verificar que el producto elegido sea compatible con el gas o fluido refrigerante usado de manera regular en nuestro sistema de refrigeración. Hoy en día, existen una gran cantidad de fluidos refrigerantes, por lo que algunos fabricantes suelen ser muy específicos al momento de determinar cuál será apto para su producto. 

Con estos detalles podemos tener una idea más clara al momento de elegir el mejor compresor frigorífico para nuestro caso. Sin embargo, a continuación, conoceremos algunos tipos de compresores, para ayudarnos a hacer la mejor elección.

1. Compresor frigorífico abierto

Los compresores frigoríficos abiertos a diferencia de otros, cuenta con el motor y el compresor de manera separada. En estos casos, al estar conectados a través de un manguito de acoplamiento o un sistema de correas y poleas, se pueden implementar diferentes tipos de motores, por ejemplo: eléctricos, diésel, de gas, o cualquier otro, en función de las necesidades y posibilidades de cada situación. 

Este tipo de compresores destaca por su alta potencia y a diferencia de otros herméticos, todos los componentes del sistema son totalmente accesibles para su reparación. Si vemos la parte negativa, al tener todo descubierto, puede en algún momento convertirse en una fuente de fugas de fluido refrigerante. 

2. Compresor frigorífico hermético

Otro de los tipos a considerar es el compresor frigorífico hermético, como su nombre lo indica tanto el motor eléctrico como el compresor se encuentran resguardados dentro de una carcasa sellada herméticamente. 

La mayor ventaja de estos compresores es su capacidad para evitar el ingreso de partículas externas o salga el fluido. En cuanto a las desventajas, pues este modelo tiene unas cuantas; lo primero es que su rendimiento en el ciclo de refrigeración no es el más optimo, ya que el fluido refrigerante baña el interior de la carcasa, generando un calentamiento del mismo, cosa que perjudica todo el proceso. 

En la mayoría de los casos, no permite que se modifique la capacidad de enfriamiento. Para lograr ello, se tendría que modificar la frecuencia de la corriente de alimentación. Por último, queremos destacar también que, al estar totalmente sellado, en caso de fallo es prácticamente imposible abrirlo para realizar una reparación, por lo que se tiene que sustituir, aunque esto se compensa con un precio más bajo que cualquier otro.  

3. Compresor frigorífico de pistón

Se trata de uno de los tipos más comunes del mercado, además se pueden encontrar diferentes variaciones, desde abiertos, herméticos y semiherméticos, con una gran variedad de potencias, desde las más bajas a las más altas. 

Entre los detalles característicos de estos es que requieren de una lubricación casi permanente, son muy sensibles a la presencia de líquido en la entrada, pudiendo causar problemas irreparables en las válvulas. A comparación de otros tipos de compresores, estos son más compactos y económicos, pero también son los que menor rendimiento energético tienen. 

4. Compresor frigorífico de tornillo

El último de los tipos de compresores que hoy mencionaremos, son los compresores frigoríficos de tornillo. En estos modelos el refrigerante se comprime por un tornillo helicoidal que gira a gran velocidad. 

Son probablemente, los que mejor rendimiento y prestación tengan. Así mismo, son de mucha calidad, durabilidad y fiabilidad. No obstante, también deben lubricarse de manera adecuada para protegerlos y mantener su estanqueidad entre las distintas piezas, para reducir el ruido y enfriar el líquido refrigerante.

Como ya comentamos en líneas anteriores, estos al ser más eficientes, también son más costosos. Por otro lado, también requieren de mucho más espacio para su instalación.

Si bien es cierto, las grandes novedades de domótica nos permiten desarrollar sistemas de refrigeración mucho más eficientes, es importante que conozcamos bien, los componentes del sistema para elegir aquellos que se acomoden mejor a cada situación en específica.

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